En el segundo semestre del 2012, el Cmdte Chávez presentó ante en CNE el programa de gobierno para
las elecciones del 7 de Octubre, posteriormente llamó a un proceso constituyente para
elaborar el 2° Plan Socialista 2013-2019 que se debe presentar ante la Asamblea
Nacional próximamente. Igualmente, el mismo día de la victoria electoral, desde
el balcón del pueblo, el presidente anunció que se iniciaba un nuevo ciclo revolucionario.
El 20 de octubre en el primer consejo de ministro post-electoral hizo un
llamado a la crítica y autocrítica, tal como lo recoge la publicación realizada
por el MINCI, con el título “GOLPE DE TIMON” ( Imprenta Nacional. 30 de Octubre
de 2012).
En esos múltiples momentos,
se recogen los trazos de las tareas ideológicas de este periodo histórico, sintetizada
en la consigna:
¡¡¡ Independencia
y Patria Socialista!!!!
Esta perspectiva
programática tensiona todo el periodo de transición, ya que el planteamiento anti-imperialista
de la independencia nacional, implícitamente involucra la coexistencia con
modalidades de acumulación, formas de propiedad y alianza con fracciones del
capital susceptibles de compartir
algunos objetivos nacionales. Esta
dinámica contradictoria, sólo puede resolverse
con la lucha ideológica y la modificación de las relaciones de fuerzas
vista como proceso, En su conjunto,
implica la construcción de una nueva
hegemonía social que involucra la dirección intelectual y moral, la
emancipación de los sectores explotados y oprimidos.
Veamos en palabras
del Cmdte Chávez, el reconocimiento de la situación contextual donde se inscribe
la construcción socialista:
“No nos llamemos a engaño: la formación socioeconómica
que todavía prevalece en Venezuela es de carácter
capitalista y rentista. Ciertamente, el socialismo apenas ha comenzado a
implantar su propio dinamismo interno entre nosotros. Éste es un programa precisamente
para afianzarlo y profundizarlo; direccionado hacia una radical supresión de
la lógica del capital que debe irse cumpliendo paso a paso, pero sin
aminorar el ritmo de avance hacia el socialismo.
Aquí se patentiza la
dialéctica entre lo nuevo que apenas comienza y el viejo modelo que predomina y
se niega a morir. Por esto, el programa tiene que asumir la SUPRESION DE LA
LOGICA DEL CAPITAL, PASO A PASO, impidiendo su reproducción, obstaculizando el
funcionamiento de su metabolismo que
recupera espacios y terrenos en disputa. Esto se plantea como la necesidad una
línea de batalla que pueda bloquear el retorno de la lógica del capital:
“Este es un programa que busca traspasar “la barrera del
no retorno”.
Para explicarlo con Antonio Gramsci, lo viejo debe
terminar de morir definitivamente, para que el nacimiento de lo nuevo se
manifieste en toda su plenitud.
La coherencia de este Programa de Gobierno responde a una
línea de fuerza del todo decisiva: nosotros
estamos obligados a traspasar la
barrera del no retorno, a hacer irreversible el tránsito hacia el
socialismo…”
Para a transitar ese camino,
en la presentación de su programa de gobierno el Cmdte Chávez, define las
condiciones necesarias para el cambio
revolucionario:
“Para avanzar hacia el socialismo, necesitamos de un
poder popular capaz de desarticular las tramas de opresión, explotación y
dominación que subsisten en la sociedad venezolana, capaz de configurar una nueva socialidad desde la vida
cotidiana donde la fraternidad y la solidaridad corran parejas con la
emergencia permanente de nuevos modos de planificar y producir la vida material
de nuestro pueblo. Esto pasa por
pulverizar completamente la forma de Estado burguesa que heredamos, la que aún
se reproduce a través de sus viejas y nefastas prácticas, y darle continuidad a
la invención de nuevas formas de gestión política.”
En esta cita hay
varias determinaciones que hay que resaltar:
1.- La necesidad de
un poder popular que desarticule la trama de opresión, explotación y
dominación. En nuestra perspectiva, este
es el horizonte teórico de mayor alcance programático, ya que plantea la
triple articulación: la lucha contra la explotación
del trabajo, la opresión política y la dominación cultural-
2.- Configurar una
nueva socialidad desde la cotidianidad, con nuevos modos de planificar y
producir la vida material, basada en la solidaridad.
3.- Pulverizar el
viejo estado burgués que heredamos
4.- Invención de
nuevas formas de gestión pública.
En los primeros
tópicos encontramos unas líneas que permiten establecer lo que pueden ser las
líneas del NO RETORNO O LA IRREVERSABILIDAD DE LA TRANSCIÓN SOCIALISTA:
n Poner en discusión la
explotación del trabajo, vinculada a la vigencia de la Ley del Valor ( la acumulación y reproducción del
capital basada en la absorción del plus-trabajo, obtención de plusvalía, apropiación
privada de la riqueza, el afán de lucro
). Aquí hay que preguntarse si se puede construir el socialismo defendiendo la
vigencia de la Ley del valor en la transición, como lo intentaron hacer los
soviéticos o como aún lo sostienen algunos de los defensores . El che Guevara
en su tiempo denunció los vanos intentos
de “…construir el socialismo con las armas melladas del capitalismo: propiedad
privada, mercado, dinero, mercancías,
competitividad.
La
línea de no retorno
tiene que expresarse en el modelo productivo socialista, con medidas profilácticas
concretas que eviten la reproducción del capital:
·
Formas
de apropiación del excedente, enfrentando su apropiación privada, cuestionando
el egoísmo posesivo en el terreno de la
subjetividad y los valores.}
·
Impulso
del trabajo liberador, que asume la crítica de la división social del trabajo
capitalista y la jerarquía que le es inherente, redefiniendo los conceptos de
productividad y rentabilidad propios del metabolismo del capital y su
reproducción ampliada. Todo esto implica meterle el ojo a la jornada de trabajo
y su humanización, cuestionando el trabajo parcelario.
·
Superación
de las relaciones mercantiles y el mercado, a través del desarrollo de una
planificación democrática, como dirección consciente de la producción.
Sustitución de los valores de cambio por los valores de uso, Regulación de
precios y salarios, Formas de intercambio directo: trueke .
En términos de crítica, el Cmdte Chávez en el
“GOLPE DE TIMON” que publica en MINCI, plantea al respecto:
·
“Las fábricas
construidas con fines capitalistas llevan las marcas indelebles de su “sistema operativo”, la división social
jerárquica del trabajo en conjunción con la cual fueron construidas. Un sistema
productivo que quiere activar la participación plena de los productores
asociados, los trabajadores, requiere de una multiplicidad de procesadores
“paralelos”, coordinados de la manera adecuada, así como de un correspondiente
sistema operativo que sea radicalmente diferente a la alternativa operada de
manera central, trátese de la economía dirigida capitalista o de sus bien
conocidas variedades poscapitalistas presentadas engañosamente como
“planificación”.
·
La
“máxima felicidad posible”, pasa por discutir el consumo alienado y las
necesidades artificiales, superación del “tener” por el “ser”.
n Pulverizar el estado
que heredamos y construir un nuevo modelo de gestión, como líneas del NO
RETORNO O IRREVERBILIDAD DEL PROCESO, tiene como núcleo duro lo que plantea el
Cmte Chávez en la presentación del Programa de la Patria:
n “Éste es un programa de transición al socialismo y de radicalización de la democracia participativa y
protagónica. Partimos del principio
de que acelerar la transición pasa necesariamente por, valga la redundancia, acelerar
el proceso de restitución del poder al pueblo. El vivo, efectivo y
pleno ejercicio del poder popular protagónico es insustituible condición de
posibilidad para el socialismo bolivariano del siglo XXI…”
La
radicalización de la democracia participativa y protagónica, implica impedir la
reproducción de la burocracia en el seno de las diversos estructuras
organizativas: partido, gobierno, instancias gremiales y sindicales, parlamento,
movimiento social. De allí la importancia del cuestionamiento global a
dicho fenómeno: BUROCRACIA, BUROCRATISMO, BUROCRATIZACION
· Burocracia. Que en su génesis o raíz, se vincula a la división social de trabajo
capitalista ( separación de las actividades manuales e intelectuales, divorcio
entre la teoría y la práctica, jerarquía y monopolio del saber, parcelación y fragmentación
del conocimiento, división entre la formulación-planificación-ejecución y
evaluación).
· Burocratismo en las estructuras, donde los organigramas y
sus funciones consagran la división del trabajo parcelario.
· Burocratización, como riesgo en todo proceso, que se apega a
los rituales y normas por encima de lo real concreto.
Como
profilaxis frente al fenómeno burocrático, ya desde la Comuna de Paris, los
trabajadores enarbolaron las banderas de la elección directa de los
dirigentes, rendición de cuenta y la revocatoria del mandato. Como
producto de largas luchas contra la burocracia y sus diversas manifestaciones,
se le han agregado nuevos antídotos: delegación funcional, rotación en los cargos
y sobre todo la DEMOCRACIA DEL SABER, como soberanía cognitiva
que preserva la SOBERANIA POLITICA de secuestros y tutelas.
Hoy
por hoy, la cualificación de la participación real con los anteriores líneas anti-burocráticas
se convierten en barreras del NO
RETORNO, sobre todo frente a la
seudo-participación: yo participio, tu participas, nosotros
participamos, OTROS DECIDEN.
El Cmdte Chavez en la
publicación “GOLPE DE TIMON”, plantea la democratización como un elemento
esencial del socialismo:
“Aquí tengo al [libro de] István Mészáros,1 el capítulo XIX, que
se llama “El sistema comunal y la ley del valor”.
Hay una frase que hace tiempo subrayé, la voy a leer, señores ministros,
ministras, vicepresidente, hablando de la economía, del desarrollo económico,
hablando del impulso social de la revolución: “El patrón de medición -dice
Mészáros- de los logros socialistas es: hasta qué grado las medidas y
políticas adoptadas contribuyen activamente a la constitución y consolidación
bien arraigada de un modo sustancialmente democrático, de control social y
autogestión general”.
Finalizamos estas cortas
reflexiones, con la reivindicación de la
CRBV cuando su Art 62 se convierte en paradigmático para la
participación protagónica, ya que asume la articulación del saber y el hacer:
formulación, planificación, ejecución y evaluación de las políticas públicas.
En tal sentido, aplicar el Art 62 en
todos los planes, programas y proyectos ( reiterando lo obligatorio de su cumplimiento ) es una
poderosa herramienta contra la división social del trabajo capitalista, siendo
un muro contra la burocracia.
30 de Diciembre de
2012